Monitores CRT:
Los monitores CRT, osea, los clásicos de tubo, suelen presentar los mismos problemas y averías que cualquier televisor.
Los más normales son los relacionados con la alimentación, tales como fallos en los transformadores, soldaduras frías, etc.
También pueden presentar averías en lo que es el tubo de imagen,
como oscurecimiento del mismo, fallos en la sincronización, pérdida de
algún canal de color, falta total de imagen.
El desgaste del tubo es otra avería que se produce con una cierta
frecuencia, aunque tienen que pasar bastantes horas de uso para que se
produzca.
La única avería propia de un monitor es la relativa al cable de
conexión con la tarjeta gráfica, que puede dañarse con el uso o al
doblarlo. También puede romperse o doblarse algún pin por mala
manipulación del mismo o por forzarlo al conectarlo.
Este cable se puede sustituir por otro en la mayoría de los casos,
pero esta sustitución es muy conveniente que la haga un servicio
técnico, aunque no suele ser una avería cara de solucionar.
A diferencia de averías en la CPU (torre del ordenador), en la que
si que podemos arreglar algunas cosas nosotros mismos, en un monitor
esto queda limitado a aquellos que tengan un buen conocimiento de
electrónica y reparación de televisores, además de contar con las
herramientas adecuadas, pudiendo además ser peligroso para los que no
conozcan bien el tema, ya que algunas partes del monitor soportan
tensiones muy altas (de más de 20.000 voltios) y componentes que, aunque
desconectemos el monitor de la corriente eléctrica, permanecen cargados
durante bastante tiempo.
En todos los casos debemos llevar el monitor a un servicio técnico,
pero en caso de no tener a nuestra disposición un servicio técnico de la
marca, podemos llevarlo a un servicio técnico de televisión, ya que la
mayoría de estos servicios técnicos reparan también monitores
No hay comentarios:
Publicar un comentario